Plato muy fácil de preparar y que con seguridad va a gustar a todo el mundo, contrastado. Ha sido durante mucho tiempo el plato principal de la cena de nochevieja en mi casa.
Ingredientes para 4 personas:
Ingredientes para 4 personas:
- 4 a 6 piezas de pollo (pechuga, muslos, contra muslos, alas)
- 4 patatas
- 4 dientes de ajo
- 24 almendras con piel
- Vino rosado (un mortero o vasito)
- Aceite de oliva virgen extra (un mortero o vasito)
- Orégano
- Azafrán (colorante alimenticio)
- Sal
- Puñado de almendras y piñones extra
Preparación:
En primer lugar pondremos el horno a calentar a unos 200º mientras preparamos el aliño. Para ello machaca las 24 almendras junto a los ajos pelados en un mortero. Termina de llenar el mortero con aceite de oliva virgen extra y échalo sobre un bol o recipiente hondo para remojar en él toda la carne. Llenar de nuevo el mortero con vino rosado y añadir al recipiente. Sólo queda echar sal, orégano en una cantidad generosa y azafrán o colorante alimenticio. Remueve bien para que se mezcle todo. El olor de este aliño ya nos anticipa en lo que se va a convertir este plato.
Pongamos ahora a remojar bien los trozos de pollo. Mientras se van empapando pela las patatas y córtalas en tiras más o menos gruesas. Si las cortas muy finas se quemarán antes de que se termine de hacer el pollo. Si te caben añádelas al recipiente con la salsa para que se remojen un poquito. No es necesario tenerlo aliñando mucho rato, con 10 o 15 minutos es más que suficiente. Ya sólo nos queda emparejar todos los trozos de pollo en una bandeja de horno y rellenar todos los huecos con las patatas. Cuantas más patatas puedas añadir más te lo agradecerán tus comensales... Añade sal por los dos lados del pollo y a las patatas y reparte entonces todo el aliño por encima de las piezas para que parte de las almendras y ajos machacados quede encima del pollo. Termina añadiendo un buen puñado de almendras enteras y piñones al gusto. Cierra el horno y disfruta durante unos 20 a 30 minutos del olor que despide... seguro que no puedes remediar abrirlo de vez en cuando para ver cómo va y que salgan así los vapores aromáticos... ¡¡¡se me está haciendo la boca agua!!!
En primer lugar pondremos el horno a calentar a unos 200º mientras preparamos el aliño. Para ello machaca las 24 almendras junto a los ajos pelados en un mortero. Termina de llenar el mortero con aceite de oliva virgen extra y échalo sobre un bol o recipiente hondo para remojar en él toda la carne. Llenar de nuevo el mortero con vino rosado y añadir al recipiente. Sólo queda echar sal, orégano en una cantidad generosa y azafrán o colorante alimenticio. Remueve bien para que se mezcle todo. El olor de este aliño ya nos anticipa en lo que se va a convertir este plato.
Pongamos ahora a remojar bien los trozos de pollo. Mientras se van empapando pela las patatas y córtalas en tiras más o menos gruesas. Si las cortas muy finas se quemarán antes de que se termine de hacer el pollo. Si te caben añádelas al recipiente con la salsa para que se remojen un poquito. No es necesario tenerlo aliñando mucho rato, con 10 o 15 minutos es más que suficiente. Ya sólo nos queda emparejar todos los trozos de pollo en una bandeja de horno y rellenar todos los huecos con las patatas. Cuantas más patatas puedas añadir más te lo agradecerán tus comensales... Añade sal por los dos lados del pollo y a las patatas y reparte entonces todo el aliño por encima de las piezas para que parte de las almendras y ajos machacados quede encima del pollo. Termina añadiendo un buen puñado de almendras enteras y piñones al gusto. Cierra el horno y disfruta durante unos 20 a 30 minutos del olor que despide... seguro que no puedes remediar abrirlo de vez en cuando para ver cómo va y que salgan así los vapores aromáticos... ¡¡¡se me está haciendo la boca agua!!!
Apuntes:
- Ten en cuenta que el tiempo puede variar dependiendo de la cantidad que hagas. Comprueba de vez en cuando que no se consume todo el jugo y que tanto el pollo como las patatas se doren, tal y como muestro en la foto.
- No es necesario darle la vuelta al pollo durante la cocción aunque si lo prefieres puedes hacerlo. Para no tener que hacerlo pongo el horno a calentar por arriba y por debajo en combinación con el aire.
- Es posible que parezca un poco aceitoso con la cantidad de aceite que echamos pero terminarás mojando casi todo el jugo, ya lo verás. Si lo prefieres utiliza algo menos de aceite.
- Como bien me apunta mi amiga Esther, añadiendo unas ciruelas pasas quedará buenísimo, Yo ahora siempre se las echo y no hay color. Muchas gracias Esther.
- De un día para otro este plato está ¡ESPECTACULAR!
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