Hola a todos de nuevo. Está visto que por mucho que lo intente es difícil que se me vea el pelo por aquí. Así que de tarde en tarde asomaré la cabeza para mantener al menos un poco vivo este blog. En esta ocasión vengo con unas minipizzas deliciosas y muy crujientes, ideales para aperitivo. Con estos ingredientes no es conveniente hacerlas muy grandes ya que lo ideal es que sean de bocado. Además, la gracia de estas minipizzas reside en los contrastes frío-caliente, crudo-cocido y tierno-crujiente. Por ello, es imprescindible decorarlas con la rúcula, los piñones y el parmesano justo cuando se sacan del horno, y servirlas inmediatamente. Os dejo con ellas...
Ingredientes para 24 minipizzas:
- 300 gr. de masa para pizza
- Tomate triturado
- Orégano seco
- Unas hojas de rúcula fresca
- Trozo de queso parmesano
- Puñado de piñones
- Aceite de oliva virgen extra
- Vinagre balsámico de módena
- Sal
- Pimienta negra molida
- 450 gr de harina de fuerza
- 250 ml de agua
- 1 cucharada de aceite de oliva
- 1 cucharadita de sal
- 2 cucharaditas de azúcar
- 1 cucharadita de levadura seca de panadero (10 gr)
Preparación:
Para preparar la masa de pizza utilicé la panificadora según esta receta pero se puede amasar perfectamente sin ella. Así que mezcla bien todos los ingredientes y trabaja la masa hasta que quede homogénea. Déjala fermentar 1 hora en un lugar cálido y tapada con un paño húmedo (esto ya me lo hace la panificadora solita, jeje). Estira la masa en una superficie enharinada y déjala todo lo fina que quieras. Yo utilicé el rodillo para dejarla bien fina. Corta entonces varias porciones de unos 6 centímetros de diámetro ayudándote de un vaso o un molde circular. En mi caso los corté de 9 centímetros y quedaron un poquitín grandes así que mejor más pequeños. Úntalos con tomate triturado, sal y un poquito de orégano y mételos en el horno precalentado a 200º unos 20 minutos con calor arriba y abajo.
Mientras se van haciendo las pizzas lava bien las hojas de rúcula y córtalas en trozos grandes. Alíñalas con unas cucharadas de aceite, vinagre de módena, sal y pimienta negra molida y reserva. Las cantidades del aliño depende del gusto de cada uno.
Corta el queso en virutas finas ayudándote de una mandolina. Si no tienes puedes rallarlo un poco pero no te quedará igual. Puedes intentarlo con un cuchillo afilado intentando que queden lo más finas posibles.
Tuesta los piñones en una sartén en seco, sin aceite ni nada, sin parar de removerlos para que no se quemen, durante unos 2 minutos.
Cuando estén tostadas las minipizzas sácalas del horno y sin dejar que se enfríen distribuye sobre ellas la rúcula, los piñones y el parmesano. Procura servirlas enseguida y verás que bocado tan exquisito. Para muestra un botón...
Mientras se van haciendo las pizzas lava bien las hojas de rúcula y córtalas en trozos grandes. Alíñalas con unas cucharadas de aceite, vinagre de módena, sal y pimienta negra molida y reserva. Las cantidades del aliño depende del gusto de cada uno.
Corta el queso en virutas finas ayudándote de una mandolina. Si no tienes puedes rallarlo un poco pero no te quedará igual. Puedes intentarlo con un cuchillo afilado intentando que queden lo más finas posibles.
Tuesta los piñones en una sartén en seco, sin aceite ni nada, sin parar de removerlos para que no se quemen, durante unos 2 minutos.
Cuando estén tostadas las minipizzas sácalas del horno y sin dejar que se enfríen distribuye sobre ellas la rúcula, los piñones y el parmesano. Procura servirlas enseguida y verás que bocado tan exquisito. Para muestra un botón...
4 comentarios:
Rico, rico...pero el enfoque de las fotos no lo veo claro...¡¡hay que repetirlas!!
Muy buena pinta ! y la fotografia es excelente!Saludos family.
Me encantan, que tentadoras estas minipizzas, y sobre todo la última foto que parece que hasta puedes darle un bocado ;)
besines
Buenísimas, rápidas y ricas. Besitos.
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